El Journal of International Relations está ofreciendo dos meses de libre acceso al artículo 'E.H. Carr vs Idealism: The Battle Rages On' de John J. Mearsheimer, profesor del Department of Political Science at the University of Chicago. El artículo, que es una versión de la E.H. Carr Memorial Lecture ofrecida por el autor en Aberystwyth el 14 Octubre de 2004, sostiene que las principales tesis realistas presentadas en el clásico libro de E. H. Carr, The Twenty Years’Crisis , como la predominancia de los Estados-Nación y la lógica de Balance de Poder, mantienen aún su plena actualidad. Es un texto escrito en abierta controversia con los idealistas de ayer y de hoy que constituyen el 'main stream' - sostiene el autor- de la comunidad académica británica. Un trabajo de interés, presentado por uno de los líderes actuales del realismo académico americano, que sin embargo, no dudó en oponerse a la invasión estadounidense a Irak.
Thursday, August 25, 2005
Friday, August 19, 2005
Conferencia sobre los Intelectuales y el Estado Nación
El Clinton Institute for American Studies (no dejarse llevar por el nombre) de la University College Dublin está organizando una interesante Conferencia entre el 30 Noviembre y 1 de Diciembre de 2005 acerca del rol que tiene los intelectuales en la construcción e impugnación de las identidades nacionales y políticas estatales. Aparte de la temática, lo relevante lo constituyen sus expositores confirmados que incluyen a Terry Eagleton y Slavoj Zizek. También existe la posibilidad de enviar papers hasta el 31 de Agosto de 2005. Aunque muchos no puedan asistir quizás convenga seguirle la pista a las presentaciones que regularmente se publican en el Link de la Conferencia. La Informacion tambien aparece publicada en la pagina web del circulo de santiago
Wednesday, August 17, 2005
La Política, aquella olvidada de nuestra estrategia de inserción económica internacional: A propósito del ALCA, Castells y otras ideas
El 20 de Noviembre recién pasado los 34 ministros de relaciones exteriores de los países de las Américas firmaban a regañadientes y no muy complacidos la octava declaración ministerial del ALCA. Los gobiernos de las Américas habían finalmente adoptado la alternativa de un “ALCA Ligth” esto es, por una parte el camino hacia un acuerdo multitaleral que se espera establezca un conjunto común de derechos y obligaciones que sean aplicables a todos los miembros y por otra lado el reconocimiento de los diferentes niveles de compromiso que pueden asumir los países en el acuerdo final. En la práctica, ello significa la exclusión de la negociación multilateral de los subsidios agrícolas y de las normas de propiedad intelectual, entre otras materias. Para Chile, que precisamente apostaba fuertemente por normas multilaterales que regularan dichas asuntos, el resultado obtenido no es -que duda cabe- precisamente el escenario más deseado, pero la pregunta que realmente cabe formular aquí es ¿no era acaso el más previsible?. Reflexionar en torno a esta interrogante me parece a mí central si los que se quiere es analizar una debilidad mayor en la política de inserción económica internacional que ha seguido nuestro país en los últimos años, y escapar así a la simple evaluación técnica que pudiese emerger de las incumplidas expectativas negociadoras del ALCA...
Tecnología: una nueva fantasía?
La tecnología, aquel viejo profeta de ropajes mundanos, se nos anuncia con la promesa de una nueva redención. No es, por cierto, esta vez, la voz alta - oligárquica o clerical- esgrimiendo fundamentos terrenales o trascendentes declamaciones para la defensa de un orden injusto. Pero tampoco es la convocatoria iracunda de las vanguardias aristocráticas dirigida a las multitudes haraposas y anónimas de las plazas y mercados públicos, a organizarse en un único bastión para la gesta revolucionaria. Es mas bien una vocecita tenue (lucecita diríamos) y mediática, una senal apócrifa, ubicada entre el exterior e interior de una pantalla, la que nos convoca a la más patética de las fantasías humanas: terminar con la opresión de clases con el sólo teclear del mouse de un computador. El atractivo de la fantasía, sin embargo, que es también el fundamento de su utilidad, es su proximidad. Denunciar la fantasía del sueno tecnológico no es por tanto negar su realidad (proximidad), sino por el contrario develar su actual carácter como la nueva mercadería fetichizada de un orden social -capitalista para no ser eufemísticos- radicalmente usurpador.
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